Siempre existirá el lado oscuro, para todo, nunca nada será perfecto ni color de rosas, y en el mundo de los préstamos no es la excepción. Así como hay un negocio financiero y bancario real con las entidades por las leyes correspondientes, también hay transacciones fraudulentas en categoría de préstamos, los cuales son caracterizados por estar libre de impuestos.
Es algo como la corrupción, llevar a cabo préstamos de terceros a terceros sin la debida documentación correspondiente ni lo concerniente a lugar que estas operaciones requieren. En todo el mundo hay prestamistas clandestinos, abundan demasiado. Y aunque los préstamos ofrecidos por estos individuos son libre de comisiones estatales (lo que quiere decir que los intereses son relativamente bajos) pueden tener muchos efectos secundarios negativos, y pueden significar un potencial peligro para la integridad de quien lo recibe.
Vamos a fijarnos siempre en las tasas, cuotas e intereses de dichos préstamos, compararlos con lo de alguna entidad bancaria reconocida de la zona, y por último solicitar los documentos correspondientes para que legalmente el cliente esté satisfecho y se pueda concretar el préstamo con éxito.
Los préstamos clandestinos no son recomendados, las garantías que se exigen son demasiado altas, incluso hasta con mayor valor neto que el dinero recibido. Puede que corras con suerte si logras pagar todas las cuotas e intereses a tiempo, pero en caso de que sea lo contrario te puedes ver envuelto en un problema muy feo, mas allá de lo personal, que puede poner en riesgo incluso hasta tu vida y la de los tuyos. Esto puede sonar exagerado, pero es cierto, en caso de impago en un préstamo irregular automáticamente se pone en riesgo la seguridad del beneficiado y de todo su circulo cercano y familiares, por eso y muchísimas mas razones, hay que evitarlos a como de lugar.
